Mi Madre Ausente y en mi presente.
Oh doctor
No existe medicina que el dolor calma
Ni palabra de aliento que en el corazón empalma
Cuando una Madre emprende vuelo hacia la eternidad
Es que no existe, no hay frase alguna que consuele el alma
Ni medicina que llegue para darnos calma.
Como un ave que prisionera estuvo
Cual ave peregrina que lejos voló
pero que ahora ya se libero
cual abeja que su enjambre dejó
dolor que se asemeja a cuando ella vida me dio
El mismo que hoy a mis adentros pasó.
Como no sentir su ausencia si ella fue la misma vida,
y en su amor de madre en su vientre me crio
y dejó su extensión que soy yo.
¿Me ofrenda unas lagrimas doctor?
¿Sera esa mi medicina?
Las mías se consumieron con tanto dolor.
Quiero como ella y en su honor
hacer de mi vida su extensión
y ser alegría, música y canción
y con el ejemplo honrar su memoria
ahora que ya ella está en la gloria.
Poema dedicado
por la Madre Ausente
con todo mi amor.
Maestra Aivihwer
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